"lAs CaLuMnIaS dE pUtA cIuDaD pErTeNeCeN aL pUeBlO"


domingo, 10 de enero de 2010

DE ACÁ ROCK



Dritter Teil







El rock, o sea el peronismo de la clase media. O lo que sea; al rock argentino lo inventó la dictadura; el rock le sacó la gente a los grupos armados, a las bases militantes, a los partidos. Y fundó la resistencia que mejor se digirió desde el alfonsinismo: la de los que iban presos por tener el pelo largo, o vestir como afeminados. El rock fue una cultura marginal de la clase media urbana, hecho por pibes con un acceso mediano a la cultura alta y una impregnación conflictiva con la cultura popular oficial peronista, o repulsiva con la oficial conservadora. La vanguardia del rock argentino sin embargo fue presidida por algunos nenes más o menos bien de la clase media alta, no dispuestos a estudiar para músicos clásicos ni para seguir la empresa de los padres. Hoy casi toda música popular es formalmente rock o casi: Diego Torres o Los Nocheros, trabajan con elementos adeudados a Sgt. Pepper. Después hay un rock glamour para el hedonismo de las clases pudientes y sus émulos, y la gran mayoría se llama ‘rock chabón’, que hace su eje en el conurbano, en la población europea sujeta a la vicisitud de una clase media baja y lumpenizada. Para esta gente Jagger Charly y Maradona constituyen un mismo marco de referencia. Antes era una marginalia elitista. Ahora evitista. Si se marginan no se marginan porque sí: casi no les queda otra. Es preferible intentar la salvación de ser estrellita de rock barrial a ser pinche perpetuo o empleado del Carrefour. Debería llamarse rock latinoamericanizado no ‘rock nacional’.”



M. Lecce Schlecht, “Einstein der Zionismus und der Ursprung des Rock” (trad. “¡De Acá Rock! (Litto y el falso origen del Rock en Rosario)”), ed. “Eher-Verlag”, Berlín, 2002, p. 179. [1]








[1] Lector de Rilke y Hölderlin devoto de la Bauhaus el expresionismo y Herzog – e incluso para algunos Goebbels - , más tarde traductor aficionado de Hegel y Heidegger en cuanto grupo de estudio hubiese por Echesortu y Pichincha, Miguel “Pinino” Lecce, hijo del zapatero genovés Giuseppe Lecce y de Eva Schlecht, bailarina germana y probable espía refugiada en los años 40, fue el remoto primer drummer de los Wildkatzen, esto es: Los Wild Cats, y de seguro uno de los primeros excluidos de la prehistoria litoral del rock argentino. Lecce habría sido quien propuso los nombres Wildkatzen, Blond Grosskatzen (Los grandes gatos rubios) y Die Rocks Arios, y quien impulsó la idea de formar un conjunto de “nationale Völkishrock”, alternativa rechazada por el resto de la banda. Lecce abandona el grupo para seguir su licenciatura en Filosofía en la universidad del Littoral; para algunos – Lecce mismo – expulsado del conjunto, y finalmente marginado de la historia que escribieron los que ganaron – al menos fama – en el horizonte del denominado “rock nacional”. Baterista asordinado, sociólogo mal leído, Pinino Lecce Schlecht, mala leche seguro, es sin embargo rescatado por sectores menores como precursor avant la lettre de expresiones futuras como Almafuerte Los Violadores o el mismo “rock chabón” (o Chabán - ¿chabón bian? - , no queda claro).
Menos son, empero, los que le atribuyen alguna participación en el famoso Klux del Klan.